lunes, 15 de octubre de 2012

LA TEOTERAPIA FRENTE A LA FRUSTRACIÓN



El sentimiento de inferioridad, la inseguridad, la inadecuación, la culpa, las dudas, preocupaciones y temores, no pueden dar otro fruto que la frustración.

Desde el punto de vista psicológico la frustración tiene numerosas implicaciones y es motivo de análisis y estudio, porque conlleva un sentimiento de privación de una satisfacción vital.

La frustración corresponde a ese sentimiento de inconformidad, insatisfacción con lo que soy y con lo poseo; es decir, la frustración aparece cuando la vida que tenemos no corresponde a nuestras expectativas o anhelos, pues se han malogrado los intentos por obtener esa clase de vida que deseamos o merecemos.

Consecuencias de la frustración
Las consecuencias de la frustración son devastadoras, lo primero que aparece en nosotros es la hostilidad; la cual se enfoca en dos sentidos: hacia los demás y hacia nosotros mismos. Por tanto, cuando aparece la frustración nuestro entorno se vuelve muy difícil, porque atacamos a los demás y nos atacamos a nosotros mismos.

La Teoterapia como respuesta a la frustración
El amor y la aceptación incondicional constituyen la medicina más efectiva contra la frustración. El amor implica creer en las personas, no darnos por vencidos esperando un fruto en alguien que puede parecernos un desierto.

Cuando alguien está frustrado generalmente tiene sentimientos de impotencia e ira; en esos momentos cuán importante es escuchar: “Por nada estéis afanosos…y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.